Con Bego de baja hasta de abril o mayo de 2013, (de baja y subiéndose por las paredes) me toca a mi meter una entrada casi aislada. Teníamos planeado una visita familiar a Valencia y casualmente coincidió una buena previ de viento. No conocíamos este sitio del que habíamos oído hablar en muchas ocasiones, y la verdad que esperaba mucho menos de lo que fue.
Al principio me pareció que se me había olvidado todo lo que sabía. Las manos entumecidas del frío, el viento muy fuerte para 4.7 y la dirección demasiado onshore para surfear cómodo. Algo desesperante, pero después de casi 6 meses sin pisar el agua no se puede pedir más. Sobretodo porque pasadas unas horas empecé a encontrarme mejor, cambié el tamaño de vela y todo era más cómodo. Un día aislado muy divertido y no sé si seremos capaces de volver a salir antes de que aumente la familia!
Gracias a Sergio por las fotos!